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Cooperación, solidaridad y fraternidad como formas de justicia, Malaga 6 Novembre 2017
6 Novembre 2017
El 6 de noviembre de 2017, en el Aula de Grado de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Málaga, ha tenido lugar la impartición de la Lección Inaugural del Máster de Cooperación Internacional y Políticas de Desarrollo, responsabilidad que ha sido confiada este año al Profesor D. Antonio Maria Baggio, Catedrático de Filosofía Política en el Instituto Universitario Sophia de Florencia (Italia). El acto ha estado organizado por el indicado Máster y por el Departamento de Derecho Privado Especial de la Universidad de Málaga.
El conferenciante, que ha sido elegido por ser una autoridad académica de primerísima línea internacional en cuanto al tema, se ha expresado en español, y ha desarrollado una Conferencia con el título que figura arriba, contando con numerosos asistentes, entre los que figuraban el Decano de la Facultad de Ciencias Económicas (Don Eugenio Luque Domínguez, que presidía el acto), el Decano de la Facultad de Derecho (D. Juan José Hinojosa Torralvo), además de numerosos alumnos y profesores, entre los que deben destacarse los nuevos Coordinadores del Máster, los Profesores Alberto López Toro, Salvador Pérez Moreno y Rocío Caro Gándara, que tuvieron unas palabras de cortesía y reconocimiento a los anteriores Coordinadores, Pablo Podadera Rivera y sobre todo, Antonio García Lizana, al coincidir que estaba presente.
El Profesor Baggio se refirió de forma amplia al proceso histórico en torno a los principios de justicia que alcanzaron un hito importante en las revoluciones burguesas, siendo claro ejemplo de ello el clásico tríptico de la revolución francesa (libertad, igualdad y fraternidad). Acerca de la igualdad resaltó su origen religioso en varias civilizaciones, ligado a la primera forma de multiplicidad del ser humano, representada sobre todo por la pareja de Adán y Eva, en cuyo ejemplo se expresa la “no-subordinación” del uno al otro. Ni tampoco del género humano a Dios (quien les ofrece la posibilidad de dar nombre a los animales). En cuanto a la libertad también se refirió a los relatos fundantes de las civilizaciones, sea en su vertiente positiva (libertad de hacer algo) o en la negativa (relativa al condicionamiento, como la prohibición de comer del árbol de la Ciencia del Bien y del Mal). Pero a continuación destacó que es mucho más complejo el proceso de comprensión histórica de la fraternidad, pasando a mencionar elementos comunes y diferenciales de diferentes parejas fraternas famosas: como el caso de Caín y Abel (en el que se ve el rechazo al hermano, que lleva al fratricidio, tras lo cual Caín alega no ser el “guardián” de su hermano); en el caso de Jacob y Esaú, es también difícil la relación entre hermanos, aunque surge una reconciliación; también está presente el fratricidio en el supuesto de Rómulo y Remo (Remo habría osado cruzar la línea que limitaba la ciudad, trazada por Rómulo, por lo que éste, como reacción ante tal “sacrilegio”, mata a su hermano). Podría pensarse, ante estos casos, que la fraternidad se presenta como humanamente imposible; pero no hay que olvidar que Caín fundó la primera ciudad (es decir, la Biblia presenta una relación entre la fraternidad y la convivencia política). Entre otras figuras importantes de hermanos aludió también el conferenciante a Beloveso y Segoveso, fundadores de Milán, según un relato legendario en el que no está presente el fratricidio. O, por último, el caso de Antígona y su hermano Polinices, destacando al respecto el Profesor Baggio que la aportación de la sororidad a la fraternidad suele ser subversiva (recuérdese que Antígona se rebeló contra el rey Creonte, al incumplir la orden de dar sepultura a su hermano).
Retomando la idea del tríptico revolucionario el Profesor Baggio destacó en él una síntesis original, aun no siendo original del todo. Para el conferenciante lo nuevo es que en la revolución francesa se presenta el tríptico como proyecto político, otorgándose a los tres principios un dinamismo –entre sí- hasta ese momento inexistente, puesto que anteriormente se entendían los tres principios de forma separada.
Acerca de la fraternidad el Profesor Baggio detalló, entre otras ideas de importancia, su naturaleza compleja (que, en realidad, contribuye a explicar también la noción de los otros dos principios) y relacional (ya que se es “hermano de”… otro hermano). Hizo hincapié en que la fraternidad es un principio de realidad, porque no se puede elegir a los hermanos, y al mismo tiempo de diferencia porque permite la integración, no sólo de los iguales, sino también de los diferentes (los hermanos siempre presentan diferencias entre sí, aunque sean hijos de una misma causa).
Tras la revolución, sin embargo, en palabras del conferenciante, el papel de los tres principios ha resultado ser desigual, puesto que el tercero de ellos fue rápidamente olvidado (y, más adelante, a lo largo de la historia, ha podido retornar a los ámbitos jurídico y político con otros nombres, como el de solidaridad). El profesor Baggio (que es autor de la famosa obra “El principio olvidado”) explicó que el principio de fraternidad fue presentado en el escenario revolucionario, pero rápidamente decayó, al no contar con un cuerpo social que lo sostuviera, pasando a continuación a luchar entre sí los principios de libertad y de igualdad.
El Profesor Baggio dedicó a continuación bastante atención a la investigación desarrollada por algunos como Gérald Antoine, por encargo de la UNESCO (con la ayuda del Instituto de la Cultura Francesa) en torno a la secuencia de los principios mencionados y las palabras afines. Así, por ejemplo, Antoine, como afín a la fraternidad, investigó la participación y la solidaridad. Es importante también que alrededor de 1848 la fraternidad alcanzó un momento de máxima difusión e irradiación, pero también de máxima confusión, al ser utilizada por cristianos, comunistas, socialistas, etc. También es importante, en este campo semántico, la solidaridad, a la que Antoine atribuye un origen principalmente jurídico (fundamentalmente menciona el Código de Napoleón), aunque el conferenciante señaló que otros textos jurídicos se refieren a la solidaridad incluso antes (lo cual no fue estudiado por Antoine), como lo muestra, por ejemplo, la expresión “obligatio in solidum”, propia del Derecho Romano. En el siglo XIX la solidaridad pasa del Derecho Privado al Público, para fundamentar la sociedad política en la solidaridad.
Por último, lamentó el conferenciante la reciente reducción del tríptico en el ámbito de la Unión Europea, reduciéndolo al lema “libertad, seguridad y justicia”. El hecho de que la justicia asuma el papel que antiguamente ocupaba la fraternidad le llevó a insistir en que la justicia que propicia la fraternidad es de mucho mayor calado.
Tras la conferencia, y previa la clausura del acto, se tuvo la oportunidad de iniciar un corto pero muy interesante debate.
Prof. Antonio Márquez Prieto, Universidad de Málaga